domingo, 5 de febrero de 2017

Menudo fiera, este Krispys

El Doberman
Ya os he contado más de una vez que valiente, lo que se dice valiente, no lo es. O tal vez no me lo parece, ya que Krispys tiene la fea costumbre de asustarse ante cualquier ruido o cualquier objeto que le parezca nuevo, aunque haya estado 2 meses ante sus ojos. También es verdad que en muchas ocasiones ha defendido a sus amigas ante algún perrito. O perrazo, que de todo hay. En fin.
 
Sin ir más lejos, esta mañana fría, lluviosa, tormentosa, ventosa y pletórica de aburrimiento, al bajar del TestaCorsa, he sufrido un nuevo episodio de esos tan frecuentes y desagradables: Mareo, ya sea debido al nervio Vago, bajada de tensión o lo que le de la gana. A mí me resulta indiferente: Me agacho para no caerme y que mire el que le de la gana y como le de la  gana. Desaparecen enseguida. Puedo con ellos, jijiiii
 

Que me desvío. Pues bien: Mientras yo estaba imitando a las ranas, se ha acercado un doberman (cachorro, como 10 veces mi pequeñín) y Krispys ha intentado huir. Sin conseguirlo, por supuesto. Poco a poco se han acercado, olfateado y comenzado a jugar. Sin embargo, como era de esperar, algún zarpazo cariñoso le ha debido hacer daño y ha venido a refugiarse entre mis plegadas rodillas.
 
No obstante, en una de esas rondas que efectuaba el Doberman a mi alrededor buscando a Krispis, se ha acercado mucho a mi figura agachada y protectora, y me ha empujado y desplazado. Inmediatamente, SúperKrispys ha surgido veloz y feroz, enfrentándose sin mesura al Doberman, con esos ladridos amenazadores y lanzándose sin piedad con un objetivo muy claro: Defenderme. Y lo ha conseguido, por supuesto. Hasta lo he tenido que contener, muerto de risa.
 
Y así se ha terminado su aventura, y el orgullo me ha llenado porqué, como es habitual en los perros, son capaces de defenderte sin tener en cuenta las horribles consecuencias que pueden traer dicha acción.

 
P.D.
Aunque pensándolo bien...
mmmmmm...
como íbamos ya a comer...
mmmm...
Seguro que pensaba que si me pasaba algo
se quedaba en ayunas.
¡Voy a aclararlo ahora mismo!